Yo se que tengo unos horarios muy raros. Y se que es mucho decir que tengo horarios.

El tiempo pasa por mi vida de maneras diversas y variadas. Las horas habituales de desayuno, comida, cena, de estar despierto y dormido, fueron sustituidas por un agradable y suave caos. Uno de los hijos del enorme caos que me envuelve.

Ésta falta de horarios, como todo, tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Uno se siente libre de flotar en los tranquilos brazos de la noche, y capa de hacer cualquier cosa.

Se puede trabajar muy bien, una vez que te acostumbras (como te dirá cualquier noctámbulo), y nadie te molesta, porque los humanos (repartidores, encuestadores por telefono, vecinos) están escondidos en sus madrigueras, metidos en la cama.

El problema viene cuando quieres hablar con alguien, la mayoría de la gente tiene la costumbre de estar durmiendo a estas horas tambien. El mundo es un lugar muy solitario, para bien y para mal a estas horas.

No es que viva (exclusivamente) de noche. Me despierto a eso de las 10 de la mañana. Vale que soy un zombi (+10 puntos al frikismo de éste post) durante una hora, pero despues ya vuelvo a ser casi persona. Y sigo así hasta las 4-5 de la mañana. Hay que aprovechar.

Ya queda poco para acabar el trabajo, y hay que apurar. Con un poco de suerte mañana ya está todo fino y se puede testear hardcore :D